Algunos trazos del pensamiento político de Paulo Freire
¿HAY UN
PENSAMIENTO POLÍTICO EN PAULO FREIRE?
No es un manual. Se construye y
se recrea a partir de la lectura del mundo para transformarlo.
"No hay vida ni existencia
humana sin pelea ni conflicto. El conflicto hace nacer nuestra conciencia.
Negarlo es desconocer los mínimos pormenores de la experiencia vital y social.
Huir de él es ayudar a la preservación del status quo"
Nos preguntamos: En la
experiencia humana ¿sólo y siempre hay conflictos? ¿Qué observas? ....¿Qué
observamos?
Participa. También nos puedes
enviar textos que tú selecciones. Por ejemplo también sobre el poder, el
Estado, las clases sociales, etc. También pueden ser empleados en Círculos de
Cultura y en reuniones de formación ciudadana, en el aula y en reuniones de
base.
Anímate. Entre todos construimos
autogestionariamente este espacio latinoamericano freirdeano.
josé.
"Nadie se libera solo". Paulo Freire.
1. “La proclamada excelencia del capitalismo, a la que se contrapone
la muerte de la utopía del socialismo, por un lado subraya cada vez más
la perversidad del capitalismo, y por el otro la vigencia
del sueño socialista, depurando o depurándose a costa de sacrificios y
sufrimientos, de la distorsión autoritaria.
De ahí que se afirme cada vez más la coincidencia entre socialismo y
democracia frente al fracaso del socialismo autoritario y a la maldad
intrínseca del capitalismo, insensible al dolor de las mayorías
explotadas.
Si el sueño de la burguesía emergente era el capitalismo en el
marco de la democracia burguesa, está cada más claro que el sueño de las
mayorías populares debe ser el socialismo, también dentro del ambiente
democrático.
2. "La cuestión fundamental no
es acabar con la democracia sino perfeccionarla, teniendo como eje
central ya no al capitalismo, sino al socialismo…. Forjar la unidad
entre socialismo y democracia es el desafío que claramente nos
instiga, en este fin de siglo y comienzo del milenio. Desafío, y no destino
cierto; utopía, pero no destino o sino. Futuro como problema, como
probabilidad, y no como tiempo inexorable. ( p. 156-157)
3. “La
democracia que sea estrictamente política se niega a sí misma. En
ella, el derecho que se ofrece a las masas populares es el del voto. Del
voto que, en las circunstancias perversas de la miseria en la que
aquellas masas sobreviven, se envilece y se degrada. En estas
sociedades la democracia se asegura a los miserables y a los pobres
el derecho a morir de hambre y de dolor. Ese es el caso brasileño….
La democracia puramente formal hace muy poco, o casi nada, por la
liberación de los oprimidos, a no ser a través
de la utilización de espacios políticos cuya existencia la misma
democracia formal no tiene cómo no admitir. Espacios que deben ser
aprovechados por los progresistas en la lucha por la transformación de la
sociedad”.
4. “Por
otro lado, la democracia que se autodenomina económica, de cuyo
sueño forma parte de la superación de las injusticias perpetradas en el
sistema capitalista, pero en la que en los ideales de justicia, igualdad y
respeto a las personas se encuentran sometidos a los estrechos espacios
del marco autoritario, se deteriora y se pervierte …
5. “Como siempre he
insistido, esa vocación -de humanización- no es la expresión de un
sueño idealista, sino una cualidad que los seres humanos han incorporado
histórica y socialmente a su naturaleza. En este sentido, las
discriminaciones de clase, de sexo, y de color, a las que su sume
cualquier otro tipo de discriminación y de falta de respeto hacia el ser
humano, al negar esa vocación también niegan la democracia”.
6. “Ninguna
sociedad alcanza la plenitud democrática sino se estructura legalmente
para defenderse con vigor frente a tales arremetidas. Más aún, tampoco
alcanzará la plenitud de la democracia si sus leyes contra la
discriminación no son puestas en práctica, o lo son de una manera
facciosa. Por todo esto no basta con el aparatado de las
leyes (democracia jurídica); es indispensable que se hagan
efectivas, sin importar quiénes sean las personas a quién deban
aplicarse” (p. 165-166)
7. Utilizando
una fórmula tan antigua como aún eficaz, el
dominador divide entre sí a los dominados, y de esta manera
continua reinando. La unidad de los diferentes se impone una vez más si éstos
pretenden ser eficaces en su justa lucha” (p.199-200) (…) El desmoronamiento de
lo que se llamó el “socialismo realista” y no a mi entender, del sueño o de la
utopía socialista” (p. 200) (…)
8. “La cuestión
de la violencia, no sólo -es- física, directa, sino también la
subrepticia, simbólica, violencia y hambre, violencia e intereses económicos de
las grandes potencias, violencia y religión, violencia y política, violencia y
racismo, violencia y sexismo, violencia y clases sociales.
La lucha por la paz, que no significa luchar por abolir, ni siquiera por
negar los conflictos, sino por el enfrentamiento justo y crítico de los
mismos y la búsqueda de soluciones correctas para ellos, es una
exigencia imperiosa de nuestra época”.
9. “Sin
embargo, la paz no precede a la justicia. Es por eso que la mejor manera
de luchar por la paz es haciendo justicia. Nadie domina a nadie, nadie roba a
nadie, nadie discrimina a nadie, nadie maltrata a nadie sin ser legalmente
castigado. Ni los individuos, ni los pueblos, ni las culturas, ni las
civilizaciones. Nuestra utopía, nuestra sana insanidad, es la creación de
un mundo en la que el poder se apoye de tal manera en la ética que, sin
ella, se desmiembre y no sobreviva… “
10. "La
libertad no se recibe de regalo, es un bien que se enriquece en la lucha
por él, en la búsqueda permanente, en la medida misma que no hay vida sin
la presencia, por mínima que sea de la libertad. Pero a pesar de que la
vida en sí implica la libertad, esto de ninguna manera significa que
la tengamos gratuitamente.
Los enemigos de la vida la amenazan constantemente. Por eso
necesitamos luchar, a veces para defenderla, a veces para reconquistarla y a
veces para ampliarla. (…)
En cierta parte de El Capital, hablando del
trabajo humano en comparación con el del animal, Marx dice que
ninguna abeja se compara al más ínfimo “maestro de obras”. Y es que
el ser humano, incluso antes de producir el objeto, tiene la capacidad de
idearlo. Antes de hacer la mesa el obrero la tiene dibujada en la “cabeza”. Esta
capacidad inventiva, que implica la comunicativa, existe en todos los niveles
de la experiencia vital (…) p. 206)… “No importa en qué
sociedad estemos ni a qué sociedad pertenezcamos, urge luchar con
esperanza y denuedo” (p. 207)
Cartas a Cristina. Duodécima carta
No sólo basta conocer el pensamiento de Freire
Si te sientes identificado con él, ahora debes aplicarlo en la vida
diaria